Valdeolivas&García ABOGADOS

jueves, 6 de octubre de 2011

LA "NEGLIGENCIA" DE UN JUEZ

El magistrado defiende su "independencia" y reconoce que ha podido cometer "errores" 

 La Fiscalía ha pedido la libre absolución del juez de Familia Francisco Serrano, acusado de prevaricación por prorrogar el régimen de visitas de un padre divorciado a su hijo, al considerar que no ha quedado acreditado que la resolución se dictara "dolosamente", aunque sí "de manera imprudente".
La Fiscalía, que inicialmente acusaba al juez de Sevilla de un delito de prevaricación dolosa por el que le pedía 10 años de inhabilitación, ha modificado hoy sus conclusiones provisionales durante la última sesión del juicio que se celebra en el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), con sede en Granada.
 
El Ministerio Público ha justificado su cambio de postura en su consideración de que los hechos no constituirían delito, aunque entiende que el juez actuó de forma negligente al obviar algunos elementos de prueba que podía haber practicado, como dar audiencia a la Fiscalía o a los padres del menor.
 
Por todo ello, ha solicitado la libre absolución del juez, que se enfrenta no obstante a una petición de 20 años de inhabilitación que le solicita la acusación particular, que ejerce la madre del menor.
Tanto la acusación particular como la defensa, que pide la libre absolución del juez, han elevado a definitivas sus conclusiones provisionales
 
INDEPENDENCIA
 
Por su parte, el juez Serrano, ha defendido en la última sesión de la vista su "independencia" y su "imparcialidad", aunque ha reconocido, que, como humano, ha podido cometer errores.
 
Haciendo uso de su derecho a la última palabra, el magistrado se ha dirigido a la Sala para recordar que fue en el mismo lugar donde ha sido enjuiciado donde fue designado juez en 1990 y donde tomó posesión como titular de Familia en mayo de 1998. "Desde 1990 he procurado ser fiel y cumplir los principios que juré, de independencia, de imparcialidad, y de sometimiento al imperio de la ley", ha afirmado.
 
El magistrado, suspendido cautelarmente por el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), ha reconocido que, en ocasiones, la "praxis", la "lex artis" y la "ortodoxia" son difíciles de poner por delante de la tutela judicial efectiva, y ha apuntado que "en momentos de urgencia" estas premisas "no da tiempo" a llevarlas a cabo.
 
Además, ha afirmado que durante todo este proceso ha "sufrido", y ha asegurado que en 21 años de profesión nunca se había dado de baja hasta el pasado 7 de julio, por un cuadro de ansiedad. Además, ha resaltado el "dolor", y el "sufrimiento" de aquellas madres, padres, y abuelos que no están separados de sus hijos tan sólo un día y medio, sino meses e incluso años.
También ha dicho que "lo que más daño" le ha hecho ha sido el "dolor" de su familia, de su esposa, que también sufre ansiedad, y de sus hijas, que en el instituto han tenido que soportar afirmaciones como que "tu padre es un prevaricador". Pese a todo, según ha indicado, va a seguir "confiando" en la justicia y se mantendrá "fiel" a la toga que ha vestido, según ha dicho, "con orgullo y con decencia".
 
El juicio ha quedado visto para sentencia con los aplausos de los asistentes, muchos miembros de colectivos por la custodia compartida, que además le han vitoreado a la salida de la Real Chancillería de Granada, teniendo en cuenta que la Fiscalía, que pedía inicialmente para él 10 años de inhabilitación, ha cambiado su acusación para solicitar su libre absolución.
Informó Efe y Europa Press.